viernes, 30 de marzo de 2007

Contradicción Maradoniana

El miércoles pasado la selección chilena jugaba su segundo amistoso en esta fecha FIFA. Cabe recordar que en el primer cotejo la "Roja" cayó inapelablemente 4-0 ante Brasil, en Gotemburgo, Suecia. Esta vez debía reivindicarse con su público y vencer al combinado de Costa Rica en el estadio Fiscal de Talca. Lo único malo es que el partido era a las 22.00 horas y yo estaba en el diario. A las 21.00 me quise escapar y mi editor me dijo: "Usted quédese para que ayude con el partido". Fuck. El encuentro terminaría a las 00.00 y por lo menos estaríamos escribiendo hasta las 01.00. Fuck de nuevo.

Sin embargo, sucedió un hecho inesperado. Porque informaciones provenientes de Buenos Aires indicaban que Diego Armando Maradona era internado en una clínica, debido a una descompensación, según indicó su médico de cabecera. D10S estaba en peligro de muerte. Mi editor sabe de mi fascinación por el "10" y de inmediato me sacó del partido y me puso a trabajar de lleno en el caso del "Pelusa".

Hablaba con colegas argentinos, revisaba páginas webs, veía noticiarios, escuchaba radios trasandinas para estar al tanto de la salud del más grande futbolistas de todos los tiempos. Periodísticamente era un momento ideal y un golpe noticioso que cualquier comunicador querría. Pero yo no quería dar a conocer la muerte de mi más grande ídolo.

Por un lado era atrayente firmar la nota, pero por otro era penoso. Me transformaba en el médico del "10" para comunicarle a Chile el deceso de Diego. Profesionalmente era el hito más grande conseguido hasta el momento por este humilde estudiante de periodismo, pero también se convertía en una de las noticias que nunca he querido escuchar.

Los minutos pasaban lento, mientras Chile hacía un pésimo partido ante los "Ticos", y las informaciones del estado de salud de Maradona eran contradictorias. A la vez revisaba todos los episodios de salud poco favorables que han afectado a Diego. En Abril de 1997 cuando Vino a Chile para estar en el programa "Viva el Lunes" y sufrió un problema de presión que lo llevó al hospital. Después en el 2000 cuando se encontraba vacacionando en el balneario uruguayo de Punta del Este y tuvo que se internado en una clínica a raíz de un problema cardíaco. Posteriormente encontraron cocaína en las muestras de orina. Y quizás su momento más crítico fue en el 2004 cuando estuvo internado 12 días en la clínica Argentino-Suiza y vio de cerca la muerte. Luego fue sometido a una operación en la que le insertaron un bypass gástrico.

Pero cuando Diego estuvo al borde de la muerte hace un par de años, quise que muriera. En ese entonces pensaba que era la mejor forma de morir para un grande como él, una sobredosis de droga debía acabar con su vida, tal como el rockstar que es. Debía estar a la altura de Elvis Presley, Jim Morrison, Janis Joplin, Kurt Cobain, Jimi Hendrix y tantos otros. Transformarse en un anti-ícono que las madres detestarían mientras ven a sus hijos con la cara del "10" pegada a sus pechos. Ese era el momento oportuno para que el verdadero "D10S" nos mirara desde el cielo y nos diera su aprobación futbolística. Obviamente resucitaría a los 90 minutos cuando el partido ya haya acabado y nos daría consejos de cómo patear un balón.

No obstante, ahora no quiero que muera. Me fascina verlo gritar con alevosía los goles de Boca desde su propio palco, me gusta verlo con esa gorra tipo militar y un habano en la boca. Me gusta escuchar cuando despotrica contra Bush y muestra su tatuaje del "Che" en el brazo.

Diego... si mueres... tal como dice la leyenda... sé que resucitarás.

martes, 20 de marzo de 2007

Adulto fome

Ayer después de jugar a la pelota, me emborraché con tragos caros, comí sushi y canté ebrio en un bar karaoke.

! No quiero ser un adulto joven ¡.
Extraño el vino de caja en la plaza, el frio en las manos, arrancar de los pacos, freestyle de mis amigos borrachos, tomar todos de la botella.
El barrio nunca se pierde.

martes, 13 de marzo de 2007

206. E! True Pucón Story

Dos semanas en el diario y me enviaban a mi primer viaje. Destino: Pucón. Actividad: Cubrir el Half Ironman.En el diario designaron al fotógrafo. Como el weón era curado y prendido... nos hicimos amigos de una. LLegamos al lugar donde recogerían a gráficos y periodistas, me encuentro con muchos amigos que también habían designado para cubrir la competencia sureña.Como todos los del rubro prenden con agua, armamos un buen grupete. La cosa es que llevábamos dos horas en la novena región y ya estábamos bebiendo algo.

Cinco horas más tarde tomábamos cerveza como locos en los dispensadores gratis instalados en el hotel. Después todos ebrios tirándonos a las piscina.La cosa es que al día siguiente repetimos la misma dosis. Pero esta vez venía acompañado de un rico asado de cordero. Al otro día teníamos que levantarnos a las 07.00 para ir a cubrir la tradicional competencia, pero estábamos a las 03.00 en un estado etílico cuestionable.

Sin embargo, a las 03.10 (más o menos) suena mi teléfono, trato de aparentar mi estado beodo y contesto:

- "Alo".
- "Sr. Durán", se escucha del otro lado.
- "¿Sí?".
- "Lo estamos llamando del diario y necesitamos de suma urgencia que saque unas fotografías al competidor número 206", me indican.
- "¿Quién es ese weón?", pregunto.
- "Eso no importa. Aunque si usted no trae esas fotos es mejor que no vuelva al diario. Así que coordínese con su fotógrafo".
- "Ok".
Cuando corté la llamada, ubiqué de inmediato a mi amigo gráfico para informarle la noticia. Entonces este weón me dijo:
- "Ya weón... hay que hacerla sí o sí entonces".
Seguimos con la nuestra celebración y una hora antes de levantarnos para ir a trabajar nos levantamos.

Nos fuimos en todos al lago Villarrica para estar en la partida. Con mi amigo teníamos tres preocupaciones: 1) Seguir al favorito. (Que a la postre resultó ganador), 2) Seguir a la favorita. (Que a la postres resultó ganador), 3) Fotografiar al 206.
En la salida del agua, seguimos al favorito y favorita, pero ni luces del 206. Después se subieron a sus bicicletas y nosotros a las camionetas, pero 206 brillaba por su ausencia. En el trote... seguíamos atentos a los líderes de la carrera y 206 seguía siendo una incógnita. Terminó la carrera y el bendito número no apareció nunca. Ubico a mi fotógrafo y me dice: "Weón... tengo al 216. ¿Nos sirve?", consulta.- "¿Estay weón?, le digo.Y sigue en la búsqueda del 206. Yo, en tanto, comienzo a escribir la nota para el diario. Tratando de encontrar a los ganadores para sacar alguna cuña, en fin, haciendo periodismo.

De pronto, suena mi celular y contestó. Era mi gráfico De La Muerte.

- "¿Alo?".
- "Weón... encontré al 206".

martes, 6 de marzo de 2007

Re-cayó

Ordenando un poco mi chiquero encontré los diarios que compré cuando murió Augusto Perrochet. Obviamente dejé mi labor doméstica de lado y me puse a hojear esas reliquias periodísticas.Recuerdo con alegría el día en que falleció el ex dictador. Recuerdo con alegría como la gente salió a celebrar en las calles. Recuerdo con alegría como se abrían de nuevo las grandes alamedas. Recuerdo que el día anterior Kase-O dijo que se iba a morir el hijo de puta de Pinochet.

Pero lo que más recuerdo es que un compañero de curso de Universidad dio la noticia al mundo. Y eso me pone muy orgulloso. Me habría encantado leer esa información en vivo y en directo.
Después me puse a buscar el audio de la noticia. Y lo encontré. Hoy lo escuché por primera vez, me imaginé la emoción y alegría de mi colega al leer ese comunicado.Se me pusieron los pelos de punta cuando comunicó la muerte del viejo perro. Felicitaciones compañero ... te envidio.

Audio de la noticia en vivo.